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¿Vale la pena contratar una tarifa de móvil barata?

Navegar en el móvil a diario se ha convertido en una prioridad para millones de personas. Está claro que un móvil sin Internet es, para la mayoría de seres humanos, como un pisapapeles. Las tarifas móviles han ido evolucionando en los últimos años y ya cuanto hace de esa época en la que nos gastábamos 100 euros al mes enviando SMS y llamadas (sí, fue dura pero lo cierto es que se ha terminado). Actualmente es fácil encontrar una tarifa de móvil asequible.

La tarifa de móvil más barata no tiene porque ser mala. En la actualidad los operadores han evolucionado y gracias a la libre competencia la mayoría de los OMV (operadores móviles virtuales) operan con las redes de los grandes operadores sin tener que pagar un sobrecoste como hacemos en los operadores tradicionales. Muchos operadores han surgido de la nada con buenas condiciones y buenas tarifas, una excelente noticia para todos los consumidores.

Índice

¿Por qué ha bajado tanto el precio de las tarifas móviles?

Por qué ha bajado tanto el precio de las tarifas móviles

Mantener tarifas móviles con precios abusivos era algo que, finalmente, tendría fin tarde o temprano. El abaratar estas tarifas ha permitido que los móviles ganasen importancia en la sociedad y creciera su uso. Si las tarifas móviles para navegar fuesen caras, como las llamadas, la barrera de entrada del smartphone habría sido muy alta y puede que otro «aparato» diferente hubiese ganado la batalla. Gracias a la aparición de las tarifas móviles económicas pudimos dejar el PC abandonado y pasar a navegar en nuestro móvil.

Además, gracias a aplicaciones como WhatsApp donde el gasto de datos era ínfimo, los operadores móviles tenían los días contados si seguían abusando de los precios con sus usuarios. Tarde o temprano nacería algo que los eliminaría del mapa y eso no interesaba a nadie. Estas aplicaciones nacieron como una gran competencia para los servicios de SMS tradicionales pero era un cambio que necesitábamos. Hasta la aparición de los servicios de vídeo en streaming y su potenciación en los móviles la gente no necesitaba demasiados GB para pasar el mes. Y no pensar que las operadoras no ganaron dinero con este salto, pues la mayoría de ellas se enriquecieron vendiendo móviles nuevos (el smartphone era una excusa más para colarte un nuevo teléfono).

¿Cuántos GB necesito para navegar sin problemas todo el mes?

Responder a esta pregunta con una cifra rotunda es absurdo, sin embargo, me gustaría darte unos baremos para que sepas qué cantidad de GB vas a necesitar en una tarifa para que pueda cubrir todas tus necesidades cada mes:

  • 2 GB: cantidad mínima para navegar sin sustos hasta final de mes. Suficiente para usar WhatsApp a diario, enviar algunas fotos y consultar redes sociales que consumen más datos como Facebook o Instagram, durante varias horas a la semana. Con esta cantidad raramente te quedarás colgado a menos que veas vídeos. Suelen venir acompañadas de algunos minutos, suficientes para llamar poco.
  • 5 GB: con esta cantidad de GB ya puedes consumir algunas horas de vídeo al mes (quizás incluso 3 o 4 horas si los servicios que usas no gastan demasiado) y hacer todo lo mencionado en la línea anterior. Suelen venir acompañadas de más minutos, quizás para un puñado de conversaciones largas y algunas llamadas puntuales.
  • 10 GB o más: pensado para los usuarios más exigentes, que suelen ver algún capítulo de su serie favorita, vídeos a diario (aunque no más de 1 hora), etc. Son las recomendadas para los que más navegan, aunque tampoco es una cantidad exagerada si usas Netflix a menudo y ese tipo de servicios sin estar conectado al WiFi.

A partir de ahí para arriba, el límite solo lo pone tu conexión y tus ganas de ver cosas. Si eres de los que ve todos los capítulos de sus series en el móvil puede que incluso una tarifa de 20 o 30 GB se quede corta. Pero este tipo de usos no son tan habituales como la gente cree. La mayoría de las personas, que cuentan con WiFi en casa, no suelen gastar más de 10-15 GB mensuales usando el móvil sin ningún tipo de límite. En cambio, si eres de los que nunca puede tirar de WiFi el consumo puede aumentar bastante si ves vídeos, actualizas todas tus aplicaciones y navegas a menudo en Facebook e Instagram.